Kimberly and Ricardo’s lives crossed paths a few times, but neither remembers meeting the other until June 5th, 2020, at a work pizza party. That’s when they first truly locked eyes and stepped into each other’s lives. That afternoon they talked and talked as the world disappeared around them, and at the end of the day they each went home still thinking about the other. Ricardo went home to tell his family and friends about the amazing girl he had just met and Kimberly slid into Ricardo’s Instagram DM’s. As obvious as their connection was, it took a long 6 months for Ricardo to gather up the courage to let Kimberly confess her feelings for him. And from then on the two have been inseparable. Road-tripping up the coast from LA to Seattle and back, painting or drawing together, sharing in their love of food, and going on many weekend adventures. Always with their dog Mylo of course! /// Las vidas de Kimberly y Ricardo se cruzaron varias veces pero ninguno recuerda haberse encontrado hasta el 5 de junio del 2020 en una fiesta de pizza del trabajo. Fue entonces cuando realmente se miraron a los ojos por primera vez y entraron en la vida uno del otro. Esa tarde hablaron y hablaron mientras el mundo desaparecía a su alrededor y al final del día cada uno volvió a casa pensando el uno en el otro. Ricardo fue a contarle a su familia y amigos sobre la chica increíble que acababa de conocer y Kimberly le envió un mensaje a Ricardo en Instagram apenas acabo la fiesta para continuar con la conversación. Aunque su conexión era obvia, pasaron 6 largos meses antes de que Ricardo reuniera el valor para dejar que Kimberly le confesará sus sentimientos por él. Y a partir de ese momento los dos han sido inseparables, viajando por carretera desde Los Angeles hasta Seattle y de vuelta, pintando y dibujando juntos compartiendo su amor por la comida y viviendo muchas aventuras los fines de semana. ¡Por supuesto, siempre con su perrhijo Mylo!