We're getting married!

Sometimes, love doesn’t come when you expect it. For Fernando and Cynthia, it came after years of knowing each other from a distance. In high school, Fernando had a huge crush on Cynthia. He couldn’t help but admire her from afar. They shared classes, hallways, and fleeting moments, but they never quite connected in those teenage years. Fast forward to a few years after high school, their paths crossed again. They both had grown, matured, and were at different points in their lives, but there was something undeniably magnetic about the connection they felt. What started as a friendship blossomed into something much more profound. In September 2019, they finally went on their first real date. It was like all the stars had aligned. Everything felt right — the chemistry was undeniable, and the connection they had shared for years finally had a chance. Five years later, under a canopy of stars, Fernando got down on one knee and asked Cynthia to marry him. Surrounded by their closest friends and family, Cynthia said yes, overwhelmed with love and excitement. Now, as they prepare to say “I do,” they are excited to celebrate the journey that brought them here. They can’t wait to share their love with all of you on their special day! A veces el amor no llega cuando lo esperas. Para Fernando y Cynthia, llegó después de años de conocerse a distancia. En la preparatoria, Fernando estaba muy fascinado de Cynthia. No pudo evitar admirarla desde lejos. Compartieron clases, pasillos y momentos fugaces, pero nunca conectaron del todo en aquellos años de adolescencia. Unos años después de la preparatoria, sus caminos se cruzaron nuevamente. Ambos habían crecido, madurado y se encontraban en diferentes momentos de sus vidas, pero había algo innegablemente magnético en la conexión que sentían. Lo que comenzó como una amistad se convirtió en algo mucho más profundo. En septiembre de 2019, finalmente tuvieron su primera cita real. Era como si todas las estrellas se hubieran alineado. Todo parecía estar bien: la química era innegable y la conexión que habían compartido durante años finalmente tuvo una oportunidad. Cinco años después, bajo un manto de estrellas, Fernando se arrodilló y le pidió a Cynthia que se casara con él. Rodeada de sus familiares y amigos más cercanos, Cynthia dijo que sí, abrumada por el amor y la emoción. Ahora, mientras se preparan para decir “Sí, quiero”, están emocionados de celebrar el viaje que los trajo hasta aquí. ¡Están ansiosos por compartir su amor con todos ustedes en su día especial!