We're Getting Married!

Riley and Patricia first met in December of 2017, when they both decided to go dancing at Aqua Nightclub in Downtown Minneapolis. Patricia pointed at Riley and told her best friend, Allison, to ask him to dance with her. Without hesitation, Allison brought Riley over to meet her. They danced the night away and said their goodbyes, never expecting to see each other again. Eight months later, Riley reached out to her. He was living in Minnesota and wanted to take her on a date. Their first date was followed by a second, but it was the third date that marked the beginning of something more. One fateful night, as they were hanging out after celebrating “Halloweekend”, she took a bite of pizza and realized her front tooth was missing (Sidenote: Patricia cracked her tooth when she was five and had to eventually get a crown). Despite her embarrassment, Riley reassured her how beautiful she was and even stayed by her side as they dealt with the unexpected situation. That night, in the midst of chaos and uncertainty, they shared their first kiss - a toothless kiss that would forever be etched in their memories marked by Riley saying “how roomie” afterwards. From that moment on, their love story unfolded with moments of joy, laughter, and countless memories. It was a serendipitous night that set the stage for a lifetime of happiness together. Here's to the night their hearts clicked, paving the way for a future filled with love, unconditional support and laughter.

Riley y Patricia se conocieron por primera vez en Diciembre de 2017, cuando ambos decidieron ir a bailar en Aqua Nightclub en el centro de Minneapolis. Patricia señaló a Riley y le dijo a su mejor amiga,Allison, que le pidiera que bailara con ella. Sin dudarlo, Allison llevó a Riley para que la conociera. Bailaron toda la noche y se despidieron, sin esperar volver a verse. Ocho meses después, Riley se puso en contacto con ella. Se mudo para Minnesota de Wisconsin y quería llevarla a una cita. Su primera cita fue seguida por la segunda, pero fue la tercera cita la que marcó el comienzo de algo más. Una noche fatídica, mientras pasaban el rato después de celebrar el fin de semana de Halloween, ella dio un mordisco a una pizza y se dio cuenta de que le faltaba un diente frontal (Nota al margen: Patricia se rompió el diente cuando tenía cinco años y eventualmente tuvo que ponerse una corona). A pesar de su vergüenza, Riley le aseguró lo hermosa que era e incluso se quedó a su lado mientras enfrentaban la inesperada situación. Esa noche, en medio del caos e incertidumbre, compartieron su primer beso, un beso sin un diente que quedaría grabado para siempre en sus recuerdos marcado por Riley diciendo "qué espacioso" después. A partir de ese momento, su historia de amor se desarrolló con momentos de alegría, risas e incontables recuerdos. Fue una noche que sentó las bases para una vida llena de felicidad juntos. Brindemos por la noche en la que sus corazones se conectaron, abriendo el camino hacia un futuro lleno de amor, apoyo incondicional y risas.