¿Cuántas veces te casarías con el amor de tu vida?

Todo comenzó en Agosto de 2015, cuando la llamada de un abogado de inmigración terminó, tres días más tarde, en “boda civil improvisada” en una corte de Coral Gables. Así fue como nos casamos “la primera vez”. Tres años después, llegó el momento de "casarnos de verdad". Ustedes nos conocen: lo tradicional no es nuestro fuerte, así fue como se nos ocurrió la brillante idea de casarnos ¡en un crucero! ¿Qué mejor que hacer una boda de 7 días, un viaje familiar y una luna de miel, todo al mismo tiempo? Y, por supuesto, es el Capitán del Barco el que nos casa. Todo resuelto. Maravilloso, pero nos faltó un detalle: en los cruceros las bodas son “simbólicas”…Ups! Entonces, se nos ocurrió la segunda brillante idea: tener alguna especie de bendición religiosa antes de subir al crucero…y henos aquí. Esta bendición, que a fin de cuentas es la boda más real de todas, es el motivo por el que ustedes han sido invitados a acompañarnos. Gracias a un cura muy chévere que accedió a casar a este par de locos, a una Wedding Planner que ha hecho magia y a nuestras familias que nos han apoyado en cada invento, logramos organizar una ceremonia religiosa en sólo dos semanas. Todo esto, para tener la oportunidad de pararnos ante Dios y ante ustedes, a dar gracias por la infinidad de bendiciones que hemos recibido en estos años juntos. Nadie dijo que sería fácil. Hemos pasado por altos y bajos, pero aquí estamos: felices, con salud, realizando nuestros sueños y más unidos que nunca. Sí, contaron bien, son tres (3) matrimonios con la misma persona: Civil, Religioso y Simbólico. Porque después de superar tantos obstáculos, nos encontramos con más amor que al principio. Descubrir al verdadero amor en estos “tiempos de guerra” es definitivamente un motivo para celebrar una y mil veces. Y tú, ¿cuántas veces te casarías con el Amor de tu Vida? M&M