Nuestro Compromiso - Jorge & Ailyn
Nuestra historia comenzó en una reunión en la iglesia, a la que Jorge asistió gracias a una invitación. Él vestía una camisa jean azul, jeans y tenis Converse negros; yo llevaba un vestido azul con flores amarillas. Esa noche, después de la reunión, un grupo de amigos nos invitó a cenar a un lugar cercano. Lo que parecía ser una salida casual terminó marcando el inicio de una conexión que cambiaría nuestras vidas para siempre. Desde ese día, nuestras conversaciones se hicieron constantes, y Jorge empezó a asistir regularmente a mi iglesia. En nuestra primera cita a solas, en un café, nos dimos cuenta de que Dios tenía un propósito especial para nuestra relación. Con el tiempo, ese vínculo se fortaleció, guiándonos incluso en los momentos más desafiantes, como cuando la distancia puso a prueba nuestro amor.
Este fue un día inolvidable. Durante unas vacaciones en Roatán, Jorge planeó una sorpresa perfecta en el restaurante Gula, ubicado en la playa de West Bay. A la luz del atardecer, con el sonido de las olas como fondo, él se arrodilló con un anillo en la mano y me pidió que compartiéramos nuestras vidas para siempre. Fue un momento mágico, lleno de emoción y gratitud hacia Dios, quien ha sido la roca de nuestra relación. Ese día, formalizamos el sueño de construir un futuro juntos, confiando plenamente en que Él seguirá guiando cada paso de nuestro camino.
El amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser. 1 Corintios 13:7-8 ♡