A Love Story 10 Years in the Making In the summer of 2015, two teenagers—Melissa, 15, and Joel, 16—crossed paths for the first time at a quinceanera party. It was nothing more than small talk and smiles, a moment that seemed like it would fade with time. But fate had other plans. Weeks later, a “To Be Honest” post on Facebook rekindled that spark. Melissa slid into Joel’s messages with a shy but charming honesty, and from there, their story began. Their teenage years became a scrapbook of shared memories: Melissa’s first job at Subway, Joel’s shifts at a local hardware store, those nerve-wracking moments learning to drive, and their unforgettable high school proms. By senior year, they were both working at Walgreens, laughing in the breakroom and stealing glances during slow shifts. Then came college—and the challenge of distance. Melissa moved to Milwaukee to study nursing at UWM, while Joel stayed local and enrolled in a technical college to become an electrician. The miles didn’t break them; they only strengthened the bond. Countless weekend visits, video calls, and care packages later, Melissa returned home as a registered nurse, and Joel with his electrician certification. They saved together—bit by bit—turning dreams into plans. They bought their first home, filled with both excitement and Bob's furniture. And then, in June of 2024, Joel knew it was time to make it forever. The Proposal: A Sunset in Puerto Vallarta Joel had the perfect plan: a vacation proposal in Puerto Vallarta. He took Melissa out to dinner at a stunning seaside restaurant. But while Melissa was happily taking pictures of her food and indulging in every bite, Joel was silently panicking. The mariachi band was booked for 7:00 p.m., and it was already 7:30. The sun was sinking fast. When Melissa excused herself to the bathroom, Joel whispered to the server to bring the check immediately—no more drinks, no delays. He had one shot at this. As they left the restaurant, he quickly ordered an Uber. “Let’s go watch the last bit of the sunset,” he told her, masking his nerves. They arrived at a small, quiet beach with rock-lined cliffs. To get down, they had to descend a set of stairs carved into the stone. Melissa hesitated, clutching Joel’s arm. “I don’t want to go down there. It’s too late. Let’s just go back.” But Joel couldn’t wait any longer. He looked her in the eyes, heart pounding, and said, “I know this is long overdue, but it’s happening.” Curious, Melissa peeked over the edge. “Omg… it’s really happening.” Down the steps they went—and there, on the beach below, stood her cousin, her sister, and their boyfriends. Big Marry ME letters were displayed surrounded by roses and lit by the last golden rays of sunset. A professional photographer captured every precious moment, and a mariachi band played the first chords of a love song. Joel got down on one knee. Melissa said yes. Fireworks were set off and they popped a bottle of champagne. Now & Forever Over the past decade, Joel and Melissa have grown up together. They’ve traveled, celebrated, struggled, laughed, and dreamed side by side. From Facebook chats to wedding vows, their journey is more than a love story—it’s a testament to loyalty, patience, and growing in love. Now, they’re ready for their next chapter: marriage, unity, and God’s blessing on the bond they’ve cherished since they were just teenagers. And to think—it all started with a “TBH.”

Una Historia de Amor 10 Años en Desarrollo En el verano de 2015, dos adolescentes—Melissa, de 15 años, y Joel, de 16—se cruzaron por primera vez en una fiesta de quinceañera. No fue más que una charla ligera y algunas sonrisas, un momento que parecía destinado a desvanecerse con el tiempo. Pero el destino tenía otros planes. Semanas después, una publicación de “To Be Honest” en Facebook reavivó esa chispa. Melissa se deslizó en los mensajes de Joel con una honestidad tímida pero encantadora, y desde ahí comenzó su historia. Sus años de adolescencia se convirtieron en un álbum de recuerdos compartidos: el primer trabajo de Melissa en Subway, los turnos de Joel en una ferretería local, esos momentos llenos de nervios al aprender a conducir, y los inolvidables bailes de graduación. Para el último año de secundaria, ambos trabajaban en Walgreens, riendo en la sala de descanso y robándose miradas durante los turnos tranquilos. Luego llegó la universidad—y el desafío de la distancia. Melissa se mudó a Milwaukee para estudiar enfermería en UWM, mientras Joel se quedó localmente e ingresó a un colegio técnico para convertirse en electricista. La distancia no los rompió; solo fortaleció su vínculo. Tras innumerables visitas de fin de semana, videollamadas y paquetes sorpresa, Melissa regresó como enfermera titulada, y Joel con su certificación de electricista. Ahorraron juntos—poco a poco—convirtiendo sueños en planes. Compraron su primer hogar, lleno de emoción. Y luego, en junio de 2024, Joel supo qua era momento de hacerlo para siempre. La Propuesta: Un Atardecer en Puerto Vallarta Joel tenía el plan perfecto: una propuesta durante unas vacaciones en Puerto Vallarta. Llevó a Melissa a cenar a un restaurante junto al mar, impresionante. Pero mientras Melissa tomaba fotos de su comida y disfrutaba cada bocado, Joel entraba en pánico en silencio. El mariachi estaba contratado para las 7:00 p.m., y ya eran las 7:30. Cuando Melissa se excusó para ir al baño, Joel le susurró al mesero que trajera la cuenta de inmediato—sin más bebidas ni demoras. Solo tenía una oportunidad. Al salir del restaurante, pidió un Uber rápidamente. “Vamos a ver el último pedazo del atardecer,” le dijo, ocultando sus nervios. Llegaron a una playa pequeña y tranquila. Para bajar, tenían que descender unas escaleras talladas en piedra. Melissa dudó, agarrando con fuerza el brazo de Joel. “No quiero bajar. Ya es tarde. Mejor regresemos.” Pero Joel no podía esperar más. La miró a los ojos, y le dijo: “Sé que esto ya se tardó mucho, pero ya llegó el momento.” Melissa se asomó al borde. “Omg… está pasando de verdad.” Bajaron los escalones—y allí, en la playa, estaban su prima, su hermana y sus novios. Grandes letras que decían ¿Te quieres casar conmigo? rodeadas de rosas, iluminadas por los últimos rayos dorados del atardecer. Un fotógrafo profesional capturó cada momento precioso, y una banda de mariachis comenzó a tocar los primeros acordes de una canción romántica. Joel se arrodilló. Melissa dijo que sí. Estallaron fuegos artificiales y descorcharon una botella de champán. Ahora y Para Siempre Durante la última década, Joel y Melissa han crecido juntos. Han viajado, celebrado, superado obstáculos, reído y soñado el uno al lado del otro. Desde chats de Facebook hasta votos matrimoniales, su historia es más que una historia de amor—es un testimonio de lealtad, paciencia y amor que crece. Ahora están listos para su próximo capítulo: el matrimonio, la unidad y la bendición de Dios sobre el lazo que han cultivado desde que eran solo unos adolescentes. Y pensar… que todo comenzó con un “TBH.”