El amor, dicen, está lleno de magia. Es algo que nos encuentra cuando menos lo esperamos y nos transforma para siempre. Nuestra historia es prueba de eso: fue en un instante de coincidencia donde comenzamos este viaje juntos, construyendo, día a día, un lazo que hoy se ha convertido en nuestra familia. Hemos aprendido que el verdadero amor se descubre en la espera, en esos momentos de sencillez y complicidad que nos permiten ver y aceptar la esencia del otro. Merlín, nuestro compañero fiel y testigo no tan silencioso de está historia, ha estado presente en cada risa y en cada reto, recordándonos el valor de estár presentes. Hoy, junto a él y de la mano de ustedes, reafirmamos ese amor que nos ha dado fortaleza y que nos llena de ilusión al pensar en el futuro que nos espera. Gracias por ser parte de esta historia, por traer amor bonito y energía a este día, y por recordarnos que la verdadera magia de la vida está en coincidir con las personas que hacen que cada instante valga la pena.